En tiempo de crisis.

¿Qué palabra está en boca de todos? Crisis. Pero parece que la crisis es más bien interna que externa. Porque lo material importa, pues comemos, bebemos, vivimos de ello; ¿pero al fin y al cabo no es más importante lo que somos, lo que pensamos, lo que hacemos...? ¿No importa más el ser que la apariencia? Pues, no se, me da la sensación que esta crisis económica ha iniciando una crisis emocional y existencial. Y eso me encanta, porque todo el mundo debería hacer un autoconocimiento, un auto-chequeo. El hecho de formularse las típicas preguntas existenciales (de donde venimos, para que estamos aquí, que importancia tiene nuestra existencia, que hay después, si existe dios o si no...), el solo hecho de formularse este tipo de cabezales crea un amplio abanico de posibilidades en nuestra vida. El camino que puedes crear después es impresionante, pero ese es otro tema. Sin embargo, me da la sensación de que ahora ha pegado fuerte eso de ser SUPERFICIAL, el hecho de apartar los sentimientos en la toma de decisiones, donde el egoísmo se hace notar bastante-mucho, donde no importa el por qué; lo que importa es que lo quiero, y ahora, porque quizá luego ya no me apetezca. Esa superficialidad que te hace pensar si una persona es humana o un cyborg. Por otro lado, también tenemos el auge de la ESPIRITUALIDAD. Donde el alma es lo importante. Y estamos en constante observación y aprendizaje de la verdad. Se puede asociar a la religión. Y resulta que ahora estamos entre dos distritos totalmente opuestos. Cuyos fieles se relacionan con los otros fieles. Y lo más curioso es que ya no basta ser, sino que parece que tienes que ser algo! Elegir un camino que seguir: feng shui o caos, minimalismo o modernismo, vintage o retro... Elegir un camino, volver la vista atrás, y seguir ese mismo camino una y otra vez. No se, para mi que el camino debe crearlo uno mismo. Cada vez, con más firmeza, pienso que a la mayoría de personas les es más fácil seguir un estereotipo, que crearse a sí mismos. Además, todo debe ser en intensidad, sin censuras. Y yo me pregunto, ¿es necesario que caigamos en picado para alzar el vuelo luego más y mejor? Se ve que la respuesta es que si, porque lo que yo veo ultimamente va en declive. Pero seamos positivos, que todo lo que sube baja y, todo lo que baja, mas tarde o mas temprano, subirá. Ya que en estos tiempos de crisis, lo importante NO es mantenerse, lo importante es establecerse. Y al fin y al cabo, la crisis solo es una MODA más, una mera utopía, una era que se repite con el paso de los años, como absolutamente todo.

Raquel.

¿Casualidad o causalidad?

Y de repente la vida te planta una oportunidad. Tú eliges, si tomar o dejarla. Tú eliges si es el momento o no lo es. Lo cierto es que quizá dicha oportunidad pase, para no volver. Pero la decisión es solo tuya, ¿o quizá no? ¿Elegimos nuestro camino o es el destino quién nos marca la pauta? Y desde éste primer contacto dejaré bien claro que mi opinión al respecto es muy simple: Nosotros somos propietarios efimeros de nuestras cartas y las jugamos tal y como creemos conveniente. A veces arriesgamos, a veces dudamos, a veces, simplemente, pasamos turno. Pero seguimos jugando, sin prisa pero sin pausa. Y la vida nos ofrece tantas cosas. Que a veces se nos olvida que todo lo que deseemos está a nuestro alcance. No sin esfuerzo, no sin riesgo: todo es un intercambio. Si apuesto una carta, será a cambio de otra. Pero siempre deseamos que esa carta que nos corresponde coger sea mejor que la anterior. Puede que toque el comodín o que no queden más en la baraja. Y si no arriesgas no ganas, pero a lo mejor hay cosas que no quieras ganar... Hoy decido apostar por las oportunidades. Las que tomamos y por las que dejamos. Porque todo tiene un porqué: una casualidad, me llevó a pensar en mi causalidad. Todo está ligado, al fin y al cabo. Y esto es, no tan sencillamente, lo que quiero trasmitir con mis palabras, mi perspectiva de la vida y el modo que tengo de jugar mis cartas...

Gracias. 

Raquel ^^